Imagen: Mari Lezhava.
General | 17 sep 24
El término alzhéimer genera frecuentes dudas al escribir, por lo que se ofrecen las siguientes claves para redactar adecuadamente las noticias relacionadas con esta enfermedad:
Según el Diccionario panhispánico de dudas, en las expresiones enfermedad de Alzheimer o mal de Alzheimer, debe respetarse la grafía del apellido del neurólogo alemán que investigó esta dolencia y escribirlo con mayúscula inicial y sin tilde.
Por el contrario, si se emplea este término aisladamente para referirse a dicha enfermedad, se convierte en un sustantivo común, por lo que ha de escribirse con minúscula inicial y con tilde y en redonda, es decir, sin cursiva ni comillas: «Los médicos creen que los casos de alzhéimer se triplicarán en 50 años»; aunque la Real Academia Nacional de Medicina aconseja que, en textos médicos, se utilice la denominación enfermedad de Alzheimer y no la común de alzhéimer.
El nombre Día Mundial del Alzhéimer se escribe con iniciales mayúsculas (Día, Mundial y Alzhéimer), ya que así es como la norma señala que debe hacerse con los sustantivos y adjetivos que forman parte del nombre de días señalados, y con tilde, por referirse a la enfermedad.
El término demencia hace referencia al ‘deterioro de las funciones cognitivas, adquirido de manera progresiva por una lesión cerebral de cualquier etiología’, y engloba varias enfermedades que afectan la memoria, el pensamiento y la capacidad para realizar actividades cotidianas, como señala la Organización Mundial de la Salud. Por su parte, el alzhéimer es una enfermedad degenerativa cerebral específica que causa entre el 60 y el 80 % de los casos de demencia.
La Asociación Lucha contra el Mal de Alzheimer y Alteraciones Semejantes de Rosario (ALMA) recomienda evitar el uso de la expresión demencia senil como sinónimo de enfermedad de Alzheimer u otros síndromes demenciales, ya que es inexacta, genera confusión sobre el término demencia y refuerza estereotipos negativos sobre la enfermedad.